La misión es clara: llegar a la meta sin caer. Recoge monedas en el camino, pero ten cuidado en cada paso. Los primeros niveles son más seguros, con barandillas que protegen tu camino, pero a medida que avanzas, enfrentarás puentes peligrosos y curvas sin protección.
Puedes llevar hasta cinco bolas extra. Si pierdes una, no te preocupes—puedes seguir jugando mientras tengas repuestos disponibles.